Pues si,
es tiempo de una receta, es larga de preparar pero si le metes corazón, quedas
más que bien; mejor que con un regalo de último momento. Y llevarla a comer,
“pos qué te digo”, aparte del gastote, la espera… seguro llueve… en fin,
¿quieren dar un regalo, o una emoción?, ¿algo comprado en una tienda, o algo
hecho con tus manitas?, entonces, ahí va, es el famosísimo “Ratatouille”…
¿Qué necesitas?
(Grupo 1)
6 a 8 zanahorias
3 varas de apio
2 cebollas blancas
8 a 10 jitomates
(Grupo 1)
6 a 8 zanahorias
3 varas de apio
2 cebollas blancas
8 a 10 jitomates
(Grupo 2)
Pimientos
(rojo, amarillo y verde)
1 chile poblano
2 chiles jalapeños
(Grupo 3)
2 berenjenas
Una vez cortadas las metes durante 10 minutos
en agua con sal, y escurres.
2 jitomates bola
2 calabazas grandes
2 papas grandes
(Imprescindibles)
Aceite de oliva o ghee
Ajo
Sal de mar
Pimienta para quebrar
Muchas hierbas de olor; albahaca, tomillo, laurel, orégano,
cilantro
Preparación:
Desde ¡YA!, pon a macerar parte de las
hierbitas que compraste, en un vaso o aceitera con, obvio, parte del aceite de
oliva.
En una cacerola sazona con cebolla, ajo, sal,
albahaca y pimienta en aceite, para que tomes unos seis jitomates y los
machaques dentro (¡así con la mano!), uno a uno, y a fuego muy lento vas a
dejar que reduzcan, puede pasar mucho tiempo… prueba y rectifica sal. Y machácalos
más.
Mientras esto pasa.
Corta en cuadros unas cuatro zanahorias grandes
o 6 chicas, también 2 o 3 varas de apio, 2 jitomates y media cebolla blanca.
(Grupo 1)
“Sazona un sartén”, ajo, cebolla-sal, etc… Y
agrega estas verduras, todo a fuego lento y mueve constante. (Segunda hornilla
de la estufa ocupada, jajaja…).
En una tercera, pon a quemar los chiles, todos,
(uno a uno claro) y guárdalos en bolsa de plástico para que suden y hay que
pelarlos… -Cuando cuenten esta parte a mamá, o a quien le den este platillo,
¡juro que los van a amar!-. (Grupo 2)
Una vez pelados, córtalos en tiras y agrégalos
al sartén donde están las verduras cociéndose a fuego lento, y al jitomate ¿si
le has dado sus checadas, verdad?.
Bueno, una vez rectificadas de sal y el toque
que le vayas queriendo dar con las hierbas, estas rajas y verduras van a la
licuadora o procesador de alimentos; el fin es dejar una salsa no tan licuada
porque va a ser la “cama” de las otras verduras fileteadas. Y aparte vas a
agregar el jitomate que ya debió de haber reducido, y que se hace como pastita…
Licúas o machacas todo mejor dicho (la imagen te dará una idea de la textura) y
viertes a un sartén o cacerola medio alta y ancha (que también se pueda meter
al horno). Y mantienes cociendo, tiene que espesar bastante.
Hasta aquí todo en orden ¿verdad?
Ya esto es lo más fácil… cortar y cortar todo
el Grupo 3. Necesitarás un cuchillo filoso porque sino vas a maltratar la
verdura. Procura tenerlo. Y a darle, rodajas finas porque es el toque vistoso
que tiene este platillo, y sumamente valorable. (Prende el horno a temperatura
media).
Una vez todo cortado lo vas a acomodar en el
sartén donde se ha cocido la salsa, ya tiene que estar espesa para sostener las
verduras, de acuerdo a la imagen. Rodaja por rodaja en un sentido y en otro, al
final se pueden cortar los cachitos para que acomode mejor.
Durante esta preparación debiste prender el
horno antes, rematas con unas ramas de cilantro o de albahaca encima de las
rodajas, y viertes del aceite que dejaste macerando, (eso procura tenerlo
siempre), y hasta es posible unos ajos crudos picados. Y metes al horno mínimo
unas dos horas, cuida que las verduras no se comienzan a quemar… pero eso va a
quedar delicioso, ¡lo juro!
Al final sirve en porciones ayudándote con
tenedor y cuchara para agregar otro toque de la salsita que queda abajo y puedes
acompañar con unas tapas de pan integral y aguacate.
Si lo se, tengo que admitirlo, enzimáticamente
este platillo pierde mucho por su cocción, sin embargo es el detalle para un
aniversario. ¡Qué va de esto al pastelote, los tamales, pambazos, rajas con
crema, carnitas, etc, que muy raramente se acostumbra comer en celebraciones.
Entonces aquí la “trofologueada” ¿dónde quedó?
En la preparación cuidadosa, dedicada, pensada… si mientras cocinabas o picabas
verduras, respirabas y pensabas en el Amor de y a Mamá, el platillo está listo.
Serenidad y respiración Siempre.
¿Dudas? Quedo a sus órdenes…
¡SaludOS!